top of page

Participá!

Mandanos tu testimonio a elecciones1983@gmail.com 

"Terminaba el secundario....

Teresa Buscaglia,  periodista, Buenos Aires

 

Terminaba mi secundario en un colegio estatal de San Isidro y, durante ese año, viví el despertar democrático, empecé a entender qué significaba la democracia, empecé a escuchar sin escalofríos las palabras "voto", "actos", "montoneros". Eran palabras ligadas a mi niñez más tierna y que se decían con tristeza, bronca, preocupación. Perón se volvía a mencionar y, recién a esa edad, descubrí  el tema "desaparecidos". Durante las clases de teatro, me hice amiga de chicos que cursaban el turno noche  en mi colegio. Me  empezaron a hablar del "Tío Cámpora", de la película "Quebracho" y me invitaron a  actos del colorado Abelardo Ramos, comunista orgulloso de su militancia y lo hacía saber en todos sus discursos. Sentí, a pleno,  lo que significaba la palabra "libertad" , corté el cordón umbilical definitivamente con el relato familiar y empecé a investigar qué había pasado en los 70. Y llegó  Alfonsín...

 

"Ese día de octubre.... 

​Marta Venturini, docente, Buenos Aires. ​

 

...la mayoría de los que íbamos a votar lo hacíamos con alegría pero también con la resignación de la frase más escuchada durante semanas: "yo lo voto a Alfonsin pero ya sé que va a ganar Luder". La convocatoria al Obelisco del radicalismo había sido enorme, emocionante, pero aún así no nos hacíamos muchas ilusiones. Los centros de votación eran un hervidero de gente. Se respiraba entusiasmo, nada de caras aburridas en las colas, las veredas alrededor de los centros de votación pobladas como en día de fiesta pueblerina. Luego la tarde soleada, una visita a la heladería con los niños y a ver la tele. Alrededor de las 21:30 se hablaba de que lo imposible estaba sucediendo. Ansiosa salgo a la calle con una banderita, escucho bocinas, llego a la avenida Maipu y San Lorenzo en Olivos. Enfrente la Unidad Básica del Partido Justicialista cerrada y a oscuras después de días y días de jolgorio. Caravanas de autos embanderados se mueven lentamente hacia la capital, ocupantes con medio cuerpo afuera gritando: "Alfonsin, Alfonsin!!!!", las bocinas ensordecedoras. Saludo a los que pasan saltando y sacudiendo la banderita. Me siento en el cordón, me abrazó las rodillas, apoyo la cabeza sobre los brazos y lloro. Esa noche la utopía fue realidad".

"Yo tenía diez años....

Eduardo Minutella, historiador, Buenos Aires. 

 

.... Recuerdo el cajón de Herminio, un cántico ya olvidado de los militantes del PJ ("Alfonsín, Alfonsín, el nuevo presidente de Titanes en el Ring") y a mi abuela tan querida que se equivocó de boleta en el cuarto oscuro provocándonos una risa incontrolable".

"Abrí la puerta de casa....

Paula Brufman,  Bahía Blanca 

 

... para recibir a mi papá que venía exultante por el triunfo de Alfonsin y encontré una gatita gris en una cajita. Recuerdo a mi viejo haciendo campaña, yendo a los barrios, escuchando la marcha de la bronca en un pasacassette. Recuerdo las boinas blancas que mi abuelo nos había regalado a mi hermana y a mi. Pasaron treinta años? Parece que fue otra vida"

"30 de octubre de 1983....

Fernando González, periodista, Buenos Aires. 

 

.... Yo tenía 24 años. Puse el despertador a las 7 AM. Me duché, me afeité, desayuné y a las 8 en punto estaba en la cola para votar. Había cientos. Tardé como dos horas para poder sufragar. A nadie le importaba. ¡Estábamos felices! Esos milicos mal paridos que nos habían robado la primera juventud y que habían asesinado, torturado y delinquido por fin se iban. Quedaban los socios civiles cómplices en sus puestos. No voté a Alfonsín, pero a la noche me puso contento su discurso. La noche de las tinieblas comenzaba a retirarse. 30 de octubre de 2013. Tengo 54 años y puse el despertador a las 6.40 AM para llevar a mi hija al colegio. En el auto hablábamos de la ley de medios, después por esas cosas de la charla desembocamos en el matrimonio igualitario y en un afiche de Marilina Ross y de que a la tarde se iba al cine a ver 'Blue Jasmine' con unas amigas. Qué tiempo horizontal estamos viviendo, qué importante han sido estos años de democracia para todos. Ya nadie nos quita la alegría, ni siquiera los cómplices civiles que siguen en los diarios".

"La primera Bienal de Arte Joven....

Alejandra Procupet,  editora, Buenos Aires

 

se hizo en 1983 en Buenos Aires: música, desfiles de nuevos diseñadores, muchos raros peinados nuevos...todo en torno al Centro Cultural Recoleta, en Plaza Francia, que fue copada por centenares de jóvenes que no queríamos volver a casa. La calle era nuestro lugar. La recuperación del espacio público era la consigna de esos días que parecían más soleados que nunca. La famosa primavera alfoninista mostraba sus mejores brotes. Andrés Baño, Gabriel Grippo, Sergio de Loof y Charly Garcia daban vueltas de día por allí. Por la noche, todo seguía en el Einstein, el Zero Bar y el Bolivia, lugares donde tocaban Sumo, Los Twist, Soda Stereo, y hacían delirantes performances Geniol, Katja Aleman y Omar Chabán. La ciudad y el país entero eran una promesa y todo estaba por hacerse" 

 

bottom of page